La historia del impuesto comienza en la época romana. Las personas que viven en el territorio del Imperio Romano tuvieron que pagar impuestos. Las primeras normas fiscales en los Países Bajos aparecen en 1805. Nació el principio básico de los impuestos: los ingresos. El impuesto sobre la renta se formalizó en 1904.
IVA, impuesto sobre la renta, impuesto sobre la nómina, impuesto sobre sociedades, impuesto ambiental: todos estos son parte de los impuestos que pagamos hoy. Pagamos impuestos al gobierno y a los municipios. Con los ingresos, el Ministerio de Infraestructura de los Países Bajos, por ejemplo, puede hacerse cargo de los diques; o provincias de transporte público.
Los economistas siguen discutiendo cuestiones como: ¿quién debería pagar impuestos? ¿Cuál debería ser el límite de impuestos? ¿Cómo deben gastarse los ingresos fiscales? Un estado sin impuestos no puede cuidar a sus ciudadanos.